viernes, 25 de julio de 2008

Flee a la antorcha, Free Tibet

Pancartas Pro Tibet, al paso de la llama olímpica por Buenos Aires.

El Tibet es un estado religioso protegido por la altura de su altiplano, y cercado por el cordón del Himalaya hacia el sur y oeste, y por las montañas Kunlum, que para colmo detrás espera el desierto de Takla Makan. La República Popular de China lo invadió desde el noreste en 1950, y desde entonces, su líder, el Dalai Lama vive en el exilio.
Así que ahora, para entrar al Tibet, hay que pedirle permiso a los chinos. Ahora no lo están dando, para que no les estropeen la fiestita de los Juegos Olímpicos, nada menos que su carta de presentación al mundo, después de las décadas del Comunismo.
Mientras China dejaba la estela de su antorcha por el mundo, quienes podían se manifestaban a favor del Tibet. Liberen al Tibet, piden las pancartas.
Que lo hagan de una vez, porque por ahora les están echando Flee.